
El panorama del historial crediticio en México experimenta una actualización significativa. Buró de Crédito ha anunciado cambios en su herramienta “Mi Score”, el indicador clave que predice la probabilidad de que una persona incumpla con sus pagos en los próximos 12 meses. Esta modificación, que entra en vigor a partir de octubre de 2025, busca mejorar la predictibilidad del riesgo crediticio y, sorprendentemente, amplía los rangos de puntuación, ofreciendo una nueva perspectiva tanto para los solicitantes de crédito como para las instituciones financieras.
Nuevos Rangos: Más Espacio en el “Verde” para Todos
La actualización de “Mi Score” trae consigo una redefinición de los rangos de puntuación en cada nivel de riesgo. Anteriormente, el score iba de 413 a 754, pero con los ajustes, ahora abarcará desde los 356 hasta los 848 puntos. Este cambio es sustancial y, en términos generales, significa que ahora hay un margen más amplio dentro de cada categoría, particularmente en el segmento “Excelente”.
Los nuevos rangos se distribuyen de la siguiente manera:
- Riesgo Alto (Rojo): De 356 a 577 puntos.
- Regular (Naranja): De 578 a 659 puntos.
- Bueno (Amarillo): De 660 a 696 puntos.
- Excelente (Verde): De 697 a 848 puntos.
Este ajuste es especialmente relevante en el rango “Bueno”, que ahora abarca hasta los 696 puntos (anteriormente 700), y el “Excelente”, que comienza en 697 puntos (antes 701) y se extiende hasta un nuevo tope de 848. Según Buró de Crédito, esta ampliación busca que más personas puedan calificar en niveles de riesgo favorable, a la vez que proporciona a los otorgantes de crédito una herramienta más precisa para evaluar las solicitudes.
Claves para un Mi Score Saludable: Hábitos Financieros Esenciales
Más allá de los nuevos rangos, Buró de Crédito reitera la importancia de mantener hábitos financieros sanos para asegurar un buen score. Un reporte crediticio favorable no solo facilita la obtención de nuevos créditos, sino que también puede abrir la puerta a mejores condiciones de financiamiento, como menores tasas de interés y mayores líneas de crédito. Las recomendaciones fundamentales incluyen:
- Tener créditos activos y utilizarlos: Es crucial tener productos financieros (tarjetas, préstamos) y usarlos de forma responsable para generar historial.
- Pagar a tiempo o ponerse al corriente: La puntualidad en los pagos es el factor más influyente. En caso de atrasos, corregirlos es esencial para mejorar la calificación.
- Usar las líneas de crédito con responsabilidad: Evitar endeudarse más allá de la capacidad de pago y no vivir de los créditos es vital.
Asimismo, el informe de Buró de Crédito subraya dos motivos recurrentes para el rechazo de solicitudes de crédito o la asignación de líneas de crédito bajas: no mantener la capacidad crediticia para otros financiamientos (es decir, estar sobreendeudado) y solicitar demasiados créditos en un corto lapso. Estos factores alertan a las instituciones sobre un posible riesgo de endeudamiento excesivo, lo que lleva a rechazos o condiciones menos favorables.