
El futuro de Bineo, el ambicioso banco digital de Grupo Financiero Banorte, pende de un hilo y será definido en el próximo trimestre. En medio de un panorama financiero complejo, la institución ha registrado una pérdida neta de 513 millones de pesos al cierre del primer semestre de 2025, lo que ha acelerado la necesidad de una reestructura. Marcos Ramírez, director general de Banorte, ha confirmado que ya existe una hoja de ruta para el neobanco, y las opciones sobre la mesa incluyen su venta, una fusión con otra entidad o su integración total al grupo, mientras la adquisición de Rappicard sigue en espera de aprobación.
Un Desempeño Financiero Bajo Presión
Las cifras financieras de Bineo pintan un cuadro desafiante. De los 513 millones de pesos en pérdidas netas acumuladas en el semestre, 224 millones corresponden únicamente al segundo trimestre del año. Este resultado se ve agravado por una contracción del 33% en su cartera de crédito, que se situó en apenas 11 mil millones de pesos. La incertidumbre generada por el anuncio de una posible reestructura ha tenido un impacto directo, provocando que los usuarios dejen de solicitar financiamiento.
Paralelamente, la cartera vencida ha experimentado un aumento del 9%, alcanzando los 7 millones de pesos. Este incremento se atribuye a que la misma incertidumbre ha llevado a algunos clientes a dejar de pagar sus adeudos, obligando a Bineo a ser más cauteloso en la colocación de nuevos créditos. A pesar de este panorama adverso en el crédito, no todas las noticias son malas. Los depósitos de los clientes han mostrado una notable resiliencia, aumentando a 34 mil millones de pesos, un crecimiento significativo frente a los 20 mil millones del mismo periodo del año anterior, lo que demuestra que la confianza en la captación se mantiene.
Las Rutas a Seguir y el Rol de Rappicard
Con los números sobre la mesa, Banorte explora activamente tres posibles escenarios para el futuro de su banco digital. El primero es la venta de Bineo a otro jugador del sector. El segundo es una fusión estratégica con otra institución, donde muchos analistas y usuarios especulan sobre una posible sinergia con Rappicard para dotar a Bineo de un producto de tarjeta de crédito ya posicionado. La tercera y más conservadora opción es la integración completa de Bineo dentro de la estructura de Banorte, diluyendo su independencia como neobanco.
Mientras se define el destino de Bineo, Banorte sigue a la espera de la autorización por parte de las autoridades de competencia para consolidar la adquisición de Rappicard. El grupo financiero ha confirmado que ya tienen listas nuevas ofertas y productos para la plataforma de la popular tarjeta de crédito, pero no pueden lanzarlos hasta recibir la luz verde regulatoria. La resolución de ambos frentes —el futuro de Bineo y la compra de Rappicard— definirá en gran medida la estrategia de banca digital de Banorte para los próximos años.